9° Encuentro Internacional de Editoriales Cartoneras.
Santiago de Chile/ 5, 6 y 7 de noviembre de 2021.
Este 5, 6 y 7 de noviembre participa virtualmente en este imperdible de la Biblioteca de Santiago, que será uno de los hitos en las celebraciones del aniversario de esta institución. Talleres, un recital poético, ponencias y lanzamiento de libros son alguna de las actividades de su entretenida y variada cartelera en torno a la cultura cartonera.
Este 2021 la Biblioteca de Santiago cumple 16 años entregando literatura, arte y cultura; y qué mejor que iniciar sus festejos con un clásico en su novena versión: El “Encuentro Internacional de Editoriales Cartoneras” que se desarrollará de manera virtual los días 5, 6 y 7 de noviembre.
Para esta ocasión en la cartelera en línea destacan un recital poético de “La Joyita Cartonera” con presencia de Elvira Hernández, Marina Arrate, Eugenia Brito y Catalina Espinoza, mesas de conversación como el de Editoriales Cartoneras Escolares, talleres del tipo “Maquetación de libros con software libre: Scribus”, o lanzamiento de libros como “Historia del desarraigo: poesía relacionada con el feminismo latinoamericano y negro”. Además de toda una programación en temáticas de inclusión y reciclaje con exponentes locales, mexicanos, peruanos, entre otros países; que puedes revisar en detalle en la programación.
En total más de veinte actividades virtuales para participar durante este fin de semana de noviembre dirigido tanto al público lector y afín a las editoriales cartoneras, como también familiar. Demostrando que a pesar del contexto pandémico, y al igual que el año pasado, este evento único y referente en su tipo sigue activo y planteando nuevos escenarios, propuestas y modalidades.
Esta versión del Encuentro también pasará revista a las experiencias vividas entre 2013 y 2020, donde la Biblioteca de Santiago ha sido un referente local e internacional en el apoyo a la autogestión, reciclaje, edición independiente, diseño y creación en torno al mundo cartonero. El cual tiene sus orígenes a inicios de 2000, cuando la crisis económica de Argentina obligó a escritoras/es y editoriales a ingeniárselas usando el cartón y sus facultades materiales para seguir mostrando sus textos y trabajo.